Qué ver en Azpeitia: más allá del Santuario de Loyola
14 Julio 2023 13:04
Lejos de Donosti, la costa y las zonas más turísticas, Gipuzkoa esconde una auténtica joya arquitectónica con muchísima historia. Sí, estamos hablando de Azpeitia, el pueblo legendario en el que nació Ignacio de Loyola. ¡Nuestro vasco más internacional!
En Guuk nos hemos propuesto acercarnos a una de las cunas del toreo de Euskadi pero yendo más allá del Santuario de Loyola y el pasado religioso de la zona. Aquí hay otras muchas cosas interesantes que ver y probar.
¿Te animas? Azpeitia es un destino perfecto para hacer una escapadita desde Donosti, o programar una excursión de día desde Bilbao y Vitoria. Goazen! 🗺️
Dónde está Azpeitia
Azpeitia se encuentra justo en el centro geográfico de Gipuzkoa, a 41 kilómetros de Donostia-San Sebastián. Pertenece a la comarca de Urola Costa y en 2022 registraba poco más de 15.000 habitantes. Su nombre es un buen indicativo de la localización que ostenta en esta región.
"Azpeitia" significa "peña" o "monte" de abajo. Hace referencia al monte Izarraitz que separa el municipio de Azcoitia. Y claro, esta última significa "peña" o "monte" de arriba. Por lo demás, limita con Zumárraga, Beasáin y Ezkio-Itsaso al sur, con Régil y Beizama al oeste y con Deba y Cestona al norte.
Su situación la han mantenido en una posición estratégica muy importante durante siglos. A nivel de comunicaciones Azpeitia está ligada a la ruta entre Bilbao y Donosti, y la que une a a Madrid con Irun. Es lo que tiene estar en el centro de un territorio histórico.
Cómo llegar a Azpeitia
No tiene mucho misterio. A diferencia de otros pueblos vascos con población similar, Azpeitia sí que está muy bien conectada por carretera. De hecho, partiendo de aquí es posible llegar a cualquiera de las tres capitales vascas en una hora o menos. ¿Qué otro lugar puede presumir de esto?
San Sebastián - Azpeitia: son unos 40 minutos en coche tomando la AP-8 y la GI-631. Puedes tomar la A-1, más directa pero también lenta. En autobús el UK01 sale cada media hora de la estación del centro de la ciudad en dirección al pueblo.
Vitoria - Azpeitia: toma la N-240 hacia la AP-1, mantente ahí hasta tomar la AP-8, y luego ya desvíate a la GI-2634. Es una hora de viaje sin atascos. Y en autobús vas a tener que hacer trasbordo en Eibar porque no hay conexión directa. Primero con el DG05A y luego con el UK05.
Bilbao - Azpeitia: llegarás en unos 50 minutos tomando la N-637 para incorporarte a la AP-8. Luego, como en el caso anterior, toma la GI-2634 para alcanzar el pueblo. También puedes ir en tren hasta Eibar y ahí tomar el autobús UK05 que te deja en el centro de Azpeitia.
Historia de Azpeitia
Para conocer un sitio a fondo es obligatorio conocer un poco de su historia. Y ya ni te contamos si además el escenario es Azpeitia y sus alrededores. Hay vestigios de vida prehistórica en la cueva de Ekain. Ahí es nada.
La villa original la fundó el rey Fernando IV de Castilla en 1310 tras la donación de las familias Iribarrena y Ozaka. En aquel momento se llamaba Garmendia de Irauguri, haciendo referencia al río y el valle de la ubicación. Pero tan solo un año necesitó el monarca en corregirse y rebautizarla como Salvatierra de Irauguri.
Dato 💡: a la villa le correspondía originalmente la iglesia templaria de Soreasu y estaba bajo jurisdicción del fuero de Vitoria.
¿De dónde viene lo de Azpeitia entonces? Pues en el siglo XIV ya hay documentos que hacen referencia a la población como lo hacemos actualmente. Dicho eso, estamos en un núcleo de poder feudal, en el que había una resistencia recurrente al reino y las autoridades castellanas.
Ya en aquel entonces Deba, Oria y toda esa zona formaban un eje de comunicaciones de gran importancia para el comercio. Justo por eso se decidió que por allí pasara el camino real. Para ir a hacia Getaria desde el sur había que pasar forzosamente por este territorio.
La personalidad de Azpeitia
Cansado de tantas revueltas, el rey Enrique IV desterraría a algunos de los oñazinos y demás Parientes Mayores a Andalucía. Cuando estos volvieron a casa décadas después, trajeron consigo una influencia mudéjar exclusiva en la zona.
En 1520, el conde de Salvatierra se unió al levantamiento contra la Corona en la Guerra de las Comunidades y sí, consiguió defenderse de los ataques. Durante los siglos posteriores a la Guerra de Bandos la paz le traería un crecimiento económico enorme a Azpeitia.
Era un motor comercial por sus rutas con los puertos americanos y una referencia en la industria del hierro. Es más, entre el siglo XVI y XVII la villa llegó a acoger hasta 11 ferrerías. Tanto este sector como el maderero fue muy importante para el peso estratégico de la zona.
Qué ver en Azpeitia
Lo primero en lo que se suele pensar al hablar de Azpeitia es en el Santuario de Loiola, que aunque estrictamente no está en el pueblo, sí que es la visita obligada por cercanía. Luego seguramente vayas a la plaza de toros (más si coincides con las fiestas de San Ignacio).
Pero antes de entrar en lo conocido, vamos a hacer un repaso de todos y cada uno de los edificios históricos que tiene el municipio. Ya avisamos de muchos son de tipo religioso porque esta zona tuvo un gran poder la iglesia entre los siglos XVII y XIX.
Santuario de Loiola
Es, junto al de Aranzazu, el santuario más importante de todo Euskadi. En Loiola, a menos de 2 kilómetros de Azpeitia, nos topamos con un edificio religioso monumental levantado entre el siglo XVII y XVIII en honor a Ignacio de Loyola (su casa natal está justo ahí).
Loyola fue el fundador de la Compañía de Jesús, una de las instituciones religiosas más importantes de la historia. Tras toda una vida de dedicación al Papa, nuestro icono vasco murió en Roma dejando un legado que todavía perdura. En 1622 fue canonizado.
En cuanto al propio santuario, aquí podemos encontrar la Casa-Torre de los Loyola, un gran pórtico y dos escalinatas espectaculares; la de los Papas y la de los Santos. Si pasas por Azpeitia tienes que visitar este lugar sí o sí.
Museo Vasco del Ferrocarril
El pasado más reciente de Azpeitia y de todo el valle de Urola está muy ligado con el ferrocarril. En los 80 por estos municipios pasaba el que fue el primer tren eléctrico de la península. Iba desde aquí a Zumárraga y desde ahí confluía con la línea Madrid-París y con la costera San Sebastián-Bilbao.
El servicio se terminó desmantelando por deterioro, y hoy todo esto deja tras de sí el famoso Museo Vasco del Ferrocarril. Aquí puedes encontrarte con hasta 60 trenes diferentes, herramientas relacionadas con la industria y hasta vestimentas y uniformes.
Otras cosas que ver en Azpeitia
Con esto queda visto lo más típico del municipio. Pero como hemos dicho al principio, en Azpeitia hay otras muchas cosas que ver. Aquí solo mencionamos algunas; lo mejor es que te pases tú mismo y descubras calle a calle.
Casa-Torre de Enparan: fue construida en 1320 y actualmente ostenta la biblioteca municipal. Pero en todos estos siglos ha acogido tanto a la casa Emparan (una de las más poderosas de toda Gipuzkoa), como al monarca Carlos VII. Ha sido modificada con el paso del tiempo y hoy es espectacular.
Palacio Antxieta: fíjate bien en él porque está encajonado entre otros edificios. Data del siglo XV y cuenta con una fachada de estilo mudéjar firmada por el famoso escultor Juan de Ancheta. Fue también donde nació Juan de Anchieta, uno de los mejores compositores del Renacimiento.
Iglesia de San Sebastián de Soreasu: la parroquia en la que se bautizaría Loyola, se levantó en tiempos templarios y luego fue expandiéndose durante los siglos posteriores. Cuenta con ocho capillas y un retablo gigante. Aquí descansa Martín Zurbano, consejero de los Reyes Católicos y presidente de la Inquisición.
Antiguo lavadero: no te vayas de la anterior parroquia sin visitar el que fue el lavadero municipal en el siglo XIX. Se levantó con restos de la muralla y cuenta con 20 albercas que se pueden pasear con total libertad.
Ermita de la Magdalena: hacía las veces de hospital en el siglo XVI. El propio San Ignacio permaneció ingresado aquí durante unos cuantos meses. En su interior encontrarás una imagen de Santa María de Magdalena de casi dos metros de altura.
Casa Basozabal: imponente edificio con vistas al río Urola que data del siglo XIV-XV. Está considerada como la construcción civil más antigua de Azpeitia, con un interior lleno de sorpresas para los amantes de la arquitectura.
Ermita de Nuestra Señora de Olatz: uno de los rincones con más historia del municipio. Hablamos de la ermita más antigua de Azpeitia (es anterior a la fundación de la villa en 1310). Aquí se celebraban las Juntas Particulares de Gipuzkoa entre los siglos XV y XVIII. Hoy es un lugar de peregrinación ignaciano.
Fiestas y celebraciones en Azpeitia
El patrón de Azpeitia no podría ser otro sino San Ignacio de Loyola. Este es el protagonista de la feria más importante del año en el municipio. Eso sí, no es la única. Programa bien la visita para disfrutar de alguna de ellas.
Fiestas de San Sebastián: cada 20 de enero en honor al patrón de la iglesia de San Sebastián de Soreasu.
Fiestas de San Ignacio: como hemos dicho, son las más importantes del pueblo. Se celebran cada 31 de julio, con feria taurina incluida.
Fiestas de Santo Tomás: celebración invernal. Cae cada 21 de diciembre e incluye una feria agrícola con bastante atractivo.
Junto a todo esto en Azpeitia también se celebran los carnavales. No falta los Caldederos y el tixikiteo elegante ese domingo. Es muy conocido el toro ensogado o sokamuturra.
¡Y eso es todo! Azpeitia es una joya gipuzkoana que no te va a dejar indiferente. Y en Guuk te queremos acompañar en esa sensación con la mejor tarifa móvil para tu móvil. No te pierdas nada de este increíble municipio.
Euskadik txirrindularitzarekin duen harremana duela mende bat baino gehiagokoa da. Halaber, euskal txirrindularitzak mundu mailan aipagarrienak diren txirrindulari batzuk hartzen ditu barne.