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Euskadi guarda rincones pequeñitos que, aunque no sean conocidos por muchos, nosotros sabemos el reconocimiento que merecen y cómo debemos tratarlos. De hecho, hay un ejemplo de ello en el corazón de Araba: la pintoresca villa de Laguardia, con sus bodegas, dólmenes y mucho que ver.
Desde sus imponentes murallas hasta sus antiguas bodegas, Laguardia ofrece a sus visitantes un viaje fascinante a través del tiempo, donde la tradición se entrelaza con la modernidad en un ambiente único y acogedor. ¿Te lo vas a perder?
Con una historia que se remonta a la Edad del Bronce, Laguardia ha sido testigo de siglos de acontecimientos históricos y culturales que han dejado una huella indeleble en esta pintoresca villa.
En Laguardia, la naturaleza, la arqueología y la enogastronomía se entrelazan de forma única, creando una experiencia verdaderamente especial. Y aquí estamos nosotros para guiarte y que hagas un itinerario con lo mejor de esta preciosa villa.
Fundada en el siglo X como una defensa del Reino de Navarra, su importancia estratégica se refleja en las imponentes murallas que rodean la ciudad y en sus cinco puertas de acceso. Desde entonces, Laguardia ha sido un enclave importante en la región, tanto desde el punto de vista militar como económico.
La economía de Laguardia se ha centrado tradicionalmente en la industria vinícola, que ha florecido a lo largo de los siglos. Sus numerosas bodegas, algunas de las cuales datan de tiempos ancestrales, contribuyen al prestigio de la región como productora de vino de alta calidad.
La identidad de Laguardia sigue siendo fuerte y arraigada en su rica historia y cultura. Con sus calles empedradas, sus monumentos históricos y su paisaje pintoresco, Laguardia es un destino imprescindible para quienes buscan sumergirse en la historia y la tradición de Euskadi, incluso si eres vasco.
Este lugar es el pulmón verde de la villa, un verdadero tesoro natural cerca de las murallas de la ciudad. Al norte, la majestuosa Sierra de Toloño define el paisaje, creando una vista impresionante.
Explorar las lagunas es fácil: simplemente sigue la carretera principal hacia Logroño y adéntrate en los caminos rurales que serpentean entre los viñedos. Este complejo de cuatro pequeñas lagunas tiene el título de "biotopo protegido" debido a su singularidad.
En el rico tejido histórico de Laguardia, este dolmen destaca como uno de los más importantes de Euskadi y posiblemente el más grande y mejor conservado de la región.
Descubierto en 1935, su cámara está compuesta por 9 losas que forman una figura poligonal. Las excavaciones han revelado tesoros como hachas, fragmentos de cerámica, aros y restos humanos.
Durante las festividades en torno a la virgen de Agosto, se representa un akelarre cerca del dolmen, sumergiendo a los visitantes en nuestra tradición más ancestral. ¡Es como abrir una ventana a la Prehistoria!
Situado en las afueras de Laguardia, este yacimiento arqueológico fue descubierto en 1935. Testigo de más de 3.400 años de ocupación humana, se ha convertido en el epicentro de la Edad de Bronce en la región.
Un museo junto a los restos alberga y exhibe objetos encontrados en la zona, desde vasijas y platos hasta elementos decorativos. Este recorrido por Laguardia nos sumerge en la arquitectura e historia de la villa, revelando rincones menos conocidos donde la naturaleza y el legado prehistórico se fusionan.
Laguardia es famosa por su vino, y en cada rincón encontrarás bodegas que guardan siglos de tradición vinícola. Explorar los sótanos de estas bodegas es como sumergirse en un laberinto lleno de historia, donde cada pasadizo guarda secretos y anécdotas sobre el vino que ha dado forma a la vida y la cultura de nuestra ciudad.
Algunas de las mejores bodegas que puedes visitar son:
Existen diferentes rutas que te llevan desde las diferentes capitales de Euskadi a Laguardia. Para que no te hagas un lío y lo tengas todo bien planeado, aquí te dejamos las mejores.
La distancia entre Bilbao y Laguardia es de aproximadamente 120 kilómetros.
La distancia entre Vitoria-Gasteiz y Laguardia es de aproximadamente 60 kilómetros. Es la que más cerca está y puedes incluso a pasar una mañana si te apetece.
La distancia entre Donostia y Laguardia es de aproximadamente 130 kilómetros.
Ya tienes todo lo que necesitas; la ruta, la historia y las bodegas y el internet con Guuk no son una preocupación, así que ¿a qué esperas? Coge a tus amigos, familia o quien tú quieras y disfruta de una aventura llena de historia, buen vino y grandes monumentos.
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