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El terreno, la cultura, el compromiso; se mire por donde se mire, Euskadi es una de las mayores canteras de ciclistas del mundo. De nuestra tierra han salido alguno de los txirrindularis más destacados del ahora WorldTour y del resto de competiciones menores.
De hecho, no solo hemos acunado a ciclistas vascos de éxito; por nuestros montes y montañas han pasado en sus tiempos amateur leyendas como Joaquim "Purito" Rodríguez o Contador. ¿Qué tiene de especial Euskadi? Pues sin duda que mucha, muchísima tradición.
Abraham Olano, Mikel Landa, Txomin Perurena (que nos dejó hace muy poco)... quédate por aquí porque en Guuk nos ponemos a pedalear para recordar y reconocer a los mejores ciclistas vascos de toda la historia.
¿Quién es el mejor de toda la historia? Sabemos que es una pregunta imposible de responder y que va por gustos. Por eso en Guuk no hemos querido hacer distinción, intentando mencionar a casi todos los obligados del ciclismo vasco.
Hay que tener en cuenta que Euskadi acoge este deporte desde finales del siglo XIX y que en todos estos años han salido muchos nombres reconocidos. El foco se suele poner el 13 de julio de 1883 en Donosti, y más tarde, en la primera Itzulia de la historia de 1924.
Toma nota y quédate con todos estos maillots. (entre los que hemos colado una sorpresa). ¡A por los mejores ciclistas vascos de toda la historia! 🚴🚴🚴
Es navarro pero se merece estar aquí por su influencia sobre las últimas generaciones de txirrindularis vascos y, bueno, porque está considerado como uno de los mejores ciclistas de toda la historia. ¿Quién no conoce a Miguel Induráin? El de Villava tiene el récord de haber ganado cinco ediciones consecutivas del Tour de Francia entre 1991 y 1995. Y eso es solo el principio. También cuenta con dos Giro (92 y 93), un mundial de contrarreloj (95), un oro olímpico (96) y diferentes marcas históricas en contrarreloj. Nunca aspiró a la Vuelta España, pero eso no le impidió llevarse tres Volta a Cataluña, dos París-Niza, un Campeonato de España e Ruta, la Clásica de San Sebastián y dos Dauphiné Liberé. En 1992 recibiría el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes.
No se puede hablar del ciclismo vasco sin hacer mención a la gran leyenda de Anoeta. Abraham Olano fue durante los años 90 uno de los ciclistas vascos más destacados a nivel mundial. Comenzó desde bien joven a pedalear. No se le daban bien los estudios y perdió a su mejor amigo (Mikel Oiarzabal), pero nada de eso le impidió destacar. Eso sí, se consolidaría en el velódromo antes de saltar a profesional. Se llevó el campeonato en ruta de 1995 y en contrarreloj de 1998, la Vuelta España de 1998 y 1995, la plata en Atlanta 96, el Tour de Romandía del mismo año, el Tirreno Adriático del 2000 así como varios podios del Giro y del Tour en los 90. Nadie olvida aquel Induráin-Olano en el Mundial de Duitama.
Uno de los padres del ciclismo vasco moderno. Txomin Perurena fue una auténtica leyenda internacional de este deporte (se le considera el Valverde de los 70). En menos de dos décadas (1963-1979) Peru se hizo con nada más y nada menos que 158 victorias (record histórico). Para que te hagas una idea de su habilidad, llevó el maillot amarillo de la Vuelta España durante ¡31 días! Es en esta competición donde más destacó con 12 victorias. Su paso por el Tour fue testimonial, aunque en el Giro logró llevarse dos podios. Eso sí, cuenta con dos campeonatos de España en Ruta y tres en el Campeonato de España de Montaña. Vamos, toda una auténtica bestia de Oyarzun que además ejerció de diretor deportivo del Teka, el Orebea, el Artiach y el Euskadi tras retirarse. Nos dejó en 2023.
A Marino no tardaron en llamarle el Junco de Bérriz por motivos obvios. Gemelo de tres, el bizkaíno logró cosechar más de 50 victorias entre 1979 y 1992. Fue uno de los primeros nombres que comenzaron a sonar en la primavera televisiva de este deporte, con otros iconos como "Perico" Delgado o Laguía. En lo que respecta a Marino, hablamos de un gran ciclista de fondo con muchísima humildad y sí, muchísima habilidad para la escalada. Tiene en su haber la Vuelta a España del 82 (plata en el 83 y bronce en el 91), una etapa del Tour en el 90 y otras dos en el Giro del 84 y el 91. Además, ganó tres ediciones de la Clásica de San Sebastián y otras tantas carreras vascas. En el 92 sufrió un grave accidente que no cortó su carrera pero le terminó invitando a abandonar.
Es probablemente el nombre que más resuena entre los ciclistas vascos contemporáneos. Con apenas 33 años, Mikel Landa ya ha hecho lo suficiente como para ser recordado en generaciones venideras. No cuenta con un palmarés estelar al nivel de otros iconos del deporte euskaldún, pero lleva más de una década apareciendo entre las caras más destacadas del cliclismo internacional. El de Murgia bebió de la pasión por las dos ruedas en Zuya para arrancar en la bici. Ganó la Bizkaiko Itzulia en 2007 y desde ahí ya no ha dejado de crecer. Debutaría en profesional con el Orbea en 2010, y desde entonces ha pasado por equipazos como el Euskaltel-Euskadi, el Astana el Sky o el Movistar. Nunca se le ha dado bien la Vuelta España, pero es una bala en el Giro y el Tour. ¿Qué le deparará su carrera?
No estuvo en portadas ni tiene un palmarés destacado, pero Haimar Zubeldia es un presente diario en el ciclismo vasco de los últimos 25 años. El de Usurbil ha estado presente en casi 30 grandes vueltas y le ha dado a casi todo en casi todas las competiciones. Debutó en 1998 con el Euskaltel (en el que estuvo más de una década) y eclosionó con el Astana. Donde más éxito encontró fue en el Tour, con dos bronces y dos cuartas y una quinta posición en varias etapas. En 2017 se retiró dejando atrás sus años mozos en ciclocrós y ciclismo en pista, para emprender una carrera en mountain bike. Todo un ejemplo de compromiso, pasión y adaptación.
¿Mejores ciclistas vascos? Por supuesto que entre ellos está la Perla de Mañaria. Julián Gorospe fue un indiscutible de los años 80. Hasta 1994 logró nada menos que 34 victorias, entre las que destacan sus cuatro Bizkaiko Bira, sus dos etapas en la Vuelta España, sus dos Itzulias del 83 y 90 y su etapa en el Tour del 86. Fue director deportivo del Euskaltel durante una de sus mejores épocas y se retiró en 2006 para volver a una vida más cotidiana y ajena al ciclismo en Durango.
Pieza clave del éxito del Euskaltel en su época dorada y exitoso txirrindulari de principios de los 2000. Igor González de Galdeano se ha ganado un hueco en la historia del ciclismo euskaldún por su carrera tanto en el Tour como en la Vuelta. En su palmarés encontramos un segundo puesto en la Vuelta del 99 (con dos oros en etapas) y un cuarto en la edición de 2003, así como dos quitos puestos en el Tour de 2001 y 2002, con bastante continuidad portando el maillot amarillo.
Ion Izagirre tiene por delante una de las carreras más prometedoras de todos los ciclistas vascos en activo. Su pasión por las dos ruedas le viene de familia; su padre, José Ramon Izagirre fue dos veces Campéon de España de Ciclocrós, y su hermano Gorka, también ciclista profesional del WorldTour. Este joven txirrindulari tiene ya en su palmarés dos Campeonato de España Contrarreloj, un Campeonato de Ciclismo en Ruta, una etapa del Giro de 2012, otra del Tour de 2016 y la Itzulia de 2019. Esta última competición se le da bastante bien; siempre suele colar su nombre en las primeras posiciones.
Otra de las grandes referencias para los txirrindularis más jóvenes. Miguel Mari Lasa, más conocido como "Lapa", fue uno de los mejores ciclistas vascos de su época. Entre 1969 y 1981 amasó hasta 76 victorias, con gran desempeño en seis ediciones de la vuelta, dos del Tour y tres del Giro. El de Oiartzun además participó en las Olimpiadas de México 69 y consiguió llevarse tres Campeonatos de España de Montaña casi consecutivos (69, 71 y 72). En el 74 ganó la Itzulia y en el 71, 72 y 74 se coronó en el Campeonato de España de Regiones. No consiguió ningún gran premio en las vueltas mayores, pero hizo muy buen fondo en el resto de ligas.
El de Punta Galea nunca estuvo en portadas pero siempre empujó desde atrás. A Mikel Zarrabeitia se le terminó conociendo como "El generoso" por su participación en las grandes vueltas de los años 90. Estuvo en el Banesto de Induráin y Perico, y en la ONCE de Jalaber, Saiz y Olano. Tiene un gran recorrido en la Vuelta España, donde consiguió quedar segundo en la edición de 1994. Con todo, este txirrindulari no tuvo mucha suerte profesional; una hernia de disco en el 95 y un dedo cortado por un accidente manipulando el freno en el 2000. A pesar de todo siguió compitiendo hasta 2003, cuando logró lucir el maillot en Sierra Nevada durante la Vuelta de ese año.
No nos olvidamos tampoco de otros grandes ciclistas vascos como Paco Galdós, Jesús Loroño, Joseba Zubeldia o Gorka Beloki, entre tantos otros. Euskadi es cantera de txirrindularis y lo seguirá siendo durante muchos más años.
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Viajamos desde el pirineo navarro hasta las Bardenas Reales en busca de los mejores espacios para dormir en bungalow y acampar.
