Euskal Hiria
Fiestas de la Madalena en Bermeo, Mundaka y Elantxobe
5 minDurante las fiestas de la Madalena puedes disfrutar de la romería marítima, la lanza de la teja y muchas actividades más.
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Fiestas, lo que son fiestas, en Euskal Herria no nos faltan, y eso es un hecho. Si hay algo que los vascos sabemos hacer es celebrar las tradiciones y llevarlas en el corazón. Un ejemplo de ello son las fiestas de La Madalena en Bermeo, Mundaka y Elantxobe.
Estas en concreto unen lo mejor de la tradición y el festejo. Ojo, porque aunque se celebre en tres localidades separadas, no hay duda de que es la mayor unión y muestra de hermandad posible.
Esta fiesta, conocido por casi todos nosotros como "Madalenak" es mucho más que una jornada de disfrute, música y baile —que también — es el día en el que se celebra la hermandad de estos tres pueblos.
Puede que muchas veces hayas escuchado esto y no sepas de dónde viene, no te preocupes, aquí estamos nosotros para contártelo y que te quede bien clarito.
Madalen Eguna, conocida también como las «Madalenas» de Elantxobe, es una fiesta marinera que se celebra el 22 de julio entre las localidades de Bermeo, Mundaka y Elantxobe. Esta festividad tiene sus raíces en una antigua disputa por la Isla de Izaro entre Bermeo y Mundaka.
Cuenta la leyenda que, para zanjar la disputa, se organizó una regata en la que Elantxobe actuó como árbitro. Bermeo salió victorioso y, desde entonces, la isla pertenece a este municipio. Así que, cada 22 de julio, se conmemora esta victoria con la fiesta de Madalenas.
La celebración incluye una romería marítima hacia la Isla de Izaro, donde el ayuntamiento de Bermeo lanza una teja al mar para simbolizar su posesión. En la isla, se colocan la Ikurriña y la bandera de Bermeo en el punto más alto. Luego, las embarcaciones se dirigen hacia Elantxobe, donde el alcalde entrega la makila al alcalde de Bermeo.
Un detalle único de esta fiesta es que todos los participantes, desde representantes de las instituciones hasta los y las bermeotarrak, visten de azul mahón con el pañuelo marinero, la vestimenta que recuerda en sus orígenes a las gentes del mar.
Vivir este ambiente festivo es una experiencia que no puedes perderte si estás en Bizkaia, o incluso fuera de Euskadi.
La leyenda tiene buena pinta, pero ojo, porque las actividades que se preparan en cada uno de estos municipios, más aún. Aquí te hacemos un breve resumen para que aproveches y vayas a disfrutar.
A primera hora, acércate al puerto y disfruta de un pintxo en alguno de sus bares mientras observas el ajetreo. Verás a los madrugadores buscando sitio en Elantxobe, a quienes ultiman los detalles en sus barcos, y a las Kuadrillas con bandejas de pintxos listas para el viaje. Los autobuses empiezan a salir con aquellas personas que no tienen barco ni amistades que les ofrezcan un huequito en el suyo ;).
La comitiva parte de Bermeo acompañada por la banda de música, que pone la banda sonora durante todo el recorrido. El barco del ayuntamiento, junto con los que se suman, llega hasta Izaro y se coloca en la parte trasera de la isla.
Antes, una lancha ha ido a colocar las banderas de Bermeo y la ikurriña. Una vez que ondean, es la señal para lanzar la teja, reivindicando la posesión de Bermeo sobre la isla.
Cumplida la tradición, esta peculiar procesión de barcos pone rumbo a Elantxobe, donde el alcalde espera para recibirlos. Si no has tenido la suerte de ir en barco, puedes unirte en este momento y seguir el recorrido.
Elantxobe es característico por sus calles empinadas, por lo que toca subir hasta el frontón. Allí, dos dantzaris dedican un baile a los bermeanos y bermeanas y, en seguida, todo el mundo se une. Luego, la representación institucional y personas invitadas se van a comer.
Llegado este momento del día, Elantxobe es pura fiesta. Los que vinieron en barco se juntan con los que llegaron antes en coche o autobús. Se bebe, se come, se baila en un pueblo que el resto del año es un remanso de paz, pero que el día de Madalenas ¡explota!
Al mediodía, verás a gente comiendo en sus barcos o con un bocadillo en el muro del puerto. Si hace mucho calor, lo mejor es refrescarse en la piscina natural del puerto.
Sobre las 18:00, el barco oficial de Bermeo zarpa hacia su próxima parada: Mundaka. Muchos barcos bermeanos lo acompañan, pero otros muchos prefieren quedarse en la fiesta de Elantxobe.
La celebración en Elantxobe puede extenderse hasta más allá de las 10 de la noche aunque los primeros autobuses hacia Bermeo y Mungia salen sobre las 20:00, y realmente, la fiesta como tal acaba en Bermeo.
Al llegar a Mundaka, su alcalde también está esperando para recibir a los bermeanos y bermeanas. La visita es breve y, como en Elantxobe, se repite el aurresku en la plaza del pueblo. Si estás pasando el día allí, será imprescindible que te acerques al puerto, que estará muy animado.
Finalmente, los barcos regresan a Bermeo. En el puerto, los que se han quedado en tierra reciben a la comitiva con aplausos, mientras recorren el puerto y el parque. Es un momento muy bonito y, si quieres formar parte de uno de los famosos aurreskus, solo tienes que acercarte a Goiko Plaza.
En cuanto veas que la gente empieza a cogerse de las manos y a dar vueltas sin parar al ritmo de la fanfarria, únete, no tengas miedo.
Aunque la fiesta termina oficialmente en el puerto, si tienes la suerte de que haya caído en fin de semana, se prolongará en los bares del pueblo hasta la madrugada.
Estas fiestas, llenas de mar, tradición y buen ambiente, son una muestra viva del espíritu y la cultura de Euskadi. Con Guuk, podrás compartir cada instante, seguir la programación de las fiestas y mantenerte en contacto con amigos y familiares. ¡Vive la tradición y la modernidad al mismo tiempo con la conexión que te ofrece Guuk!
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